GALILEO GALILEI, EL PADRE DE LA CIENCIA MODERNA
Esta semana hemos grabado el último programa de la temporada del podcast Nomecuenteshistorias en el que participamos. Aunque nosotros desde Aprobatorio publicaremos algún artículo más este verano… así que no dejéis de leernos.
Aunque haya un descanso de verano en el podcast no quiere decir que no podáis continuar escuchándolo: ¡aprovechad para escuchar los programas que os hayáis dejado!
En este último programa tocaba hablar de la Toscana, aprovechando que el 2 julio fue el Palio de Siena. Y nosotros aportamos un poco de conocimiento sobre un personaje toscano muy enriquecedor para el mundo de las Matemáticas y la ciencia. Es decir, para el mundo en general, porque… ¿qué sería de nosotros sin la ciencia?
Galileo Galilei
Galileo es considerado por muchos como el padre de la ciencia moderna. Fue un famoso astrónomo, físico y matemático italiano que vivió entre los siglos XVI y XVII. Nació en Pisa en 1564.
Parece que estudió en un convento pero su padre lo sacó para que estudiara Medicina, aunque no acabó la carrera y terminó abandonando los estudios sin recibir el título a los 21 años. Sentía un gran interés por las Matemáticas, las cuales pueden ser las culpables de no haber invertido suficientes horas de estudio a la práctica de la Medicina.
Galileo Galilei creía firmemente que todo lo que sucedía en la naturaleza podía explicarse por medio del lenguaje matemático. Galileo consiguió hacer ver al mundo que sin números el ser humano jamás lograría llegar a entender cómo funciona el Universo.
Sus aportaciones a la ciencia son inmensas: desde las primeras leyes del movimiento (que luego serían la base para las teorías de Isaac Newton) hasta la creación del precursor del termómetro, llamado termoscopio. También estudió magnetismo y mil cosas más.
Trabajo en la universidad de Padua, o Padova, como la conocemos por aquí, y ahí es donde hizo la mayoría de sus hallazgos.
DESARROLLO DEL MÉTODO CIENTÍFICO
Como os hemos dicho se le considera el padre de la ciencia moderna porque es a él a quien le debemos agradecer el desarrollo del método científico. Era firme defensor de que las investigaciones se debían basar en el planteamiento de una hipótesis que, en función de los hallazgos y diferentes pruebas empíricas, iba a ser rechazada o aceptada.
DUDA DE LA TEORÍA GEOCÉNTRICA
Estando en Padua encontramos uno de los momentos cumbre de su carrera profesional, y es por el que todos lo conocemos. En 1609 es el año en el que perfeccionó el telescopio (podía agrandar los cuerpos celestes hasta 30 veces) y pudo observar el cielo nocturno de una forma que jamás nadie habia logrado antes, y obtuvo los hallazgos que le permitieron poner en duda la teoría geocéntrica.
Sus observaciones con el telescopio le sirvieron para demostrar que los cuerpos celestes no giraban alrededor de la Tierra, sino que los planetas giraban alrededor del Sol. Galileo confirmaba con este descubrimiento la teoría de Nicolás Copérnico que había formulado años atrás, en la que él mismo decía que la Tierra no era el centro de todo
En 1611 se desplazó hasta la capital pontificia, Roma, con la intención de presentar sus hallazgos revolucionarios. Llamó la atención de muchos científicos y, también, el rechazo de la mayoría de las autoridades eclesiásticas. Afirmar que la Tierra no era el centro del Universo era atentar contra uno de los pilares fundamentales de la Iglesia y la religión cristiana. De hecho este aporte es considerado el momento definitivo en el divorcio entre la Iglesia y la Ciencia, que hasta entonces habían trabajado de la mano.
Para burlar la censura en vez de “defender” al heliocentrismo presentaba esta idea como una hipótesis. Con lo cual, técnicamente, no la estaba defendiendo, sino explicando. Un inteligente y sutil matiz que le permitió seguir publicando un tiempo.
Pero cansado de esconder su teoría en 1632 publicó una obra en la que defendía abiertamente la teoría heliocéntrica: Diálogos sobre los dos máximos sistemas del mundo
Y la inquisición empezó a investigar su caso como herejía porque le habían prohibido enseñar y defender las ideas de Copérnico. Fue juzgado en Roma por incumplimiento de la censura de 1633, tratándolo de crimen y amenazándole con ser torturado. Galileo Galilei acabó siendo obligado a negar la teoría heliocéntrica y sus hallazgos.
Tras rechazar sus ideas su condena fue reducida pasando a un arresto domiciliario. Cuenta la leyenda que, mientras abandonaba el juzgado, susurró “Eppur si muove” (“Sin embargo, se mueve”), haciendo alusión que por mucha censura, persecución y negación de los hechos, la Tierra seguiría moviéndose como él había observado.
Estuvo 5 años en arresto domiciliario hasta que se quedó ciego y le dejaron salir y trasladarse a una casa en la playa en la que murió con 77 años. Es una pena porque murió sintiéndose rechazado por sus seguidores, que no le perdonaron rendirse ante la presión inquisitorial, y visto como un hereje por la Santa Iglesia
La Iglesia católica reconoció el error de haberlo condenado en 1992, bajo el mandato de Papa Juan Pablo II. Que rabia, ¿¿no?? Cuántas injusticias… Pero bien, al final Galileo tenía razón, aunque ojala lo hubiera sabido él.
PROTECTORES DE GALILEO
A lo largo de su vida tuvo varios amigos que consiguieron retrasar la investigación hecha por la inquisición y por tanto le permitieron seguir trabajando hasta que llego su proceso inquisitorial. Entre ellos destaca Cósimo II o Cosme II, de los Medici, duque de la Toscana, que había sido alumno suyo.
En aquella época era difícil encontrar un hombre de estado como Cosimo, con amplios conocimientos de matemáticas, cultura clásica, cosmografía y que dominara varios idiomas. Pero Cosimo II murió joven de tuberculosis, con 31 años, en 1621. A su muerte, Galileo perdió buena parte de la protección medicea y comenzó su persecución que culminó con su proceso inquisitorial y su retractación pública.
Cósimo II y Galileo eran amigos, de hecho los satélites de Júpiter hoy llamados Galileanos fueron llamados por Galileo durante un tiempo en honor a Cosme II los astros mediceos.
ANÉCDOTA SOBRE COSME II Y GALILEO
Hemos encontrado en varios sitios una anécdota sobre Galileo y el duque de la Toscana, y es que el duque le planteó un problema de equiprobabilidad a Galileo.
¿¿¿Qué es eso??? pues de dos situaciones que tienen la misma probabilidad de producirse. Para que refresquéis un poco todo lo que sabéis de probabilidad, que estamos seguros de que sabéis más de lo que creéis: por ejemplo si tiramos una moneda al aire, la probabilidad de que salga cara será 1 entre 2 posibilidades que hay, osea un 50% Es equiprobable que salga cara o cruz, si no tiene defectos la moneda claro. O si por ejemplo tiramos un dado de 6 caras la probabilidad de que me salga un 5 será de 1 entre 6.
Pues bien el Duque había observado que en el juego del diez, en el cual se tiraban 3 dados y se sumaban los puntos, el resultado 10 aparecía más veces que el 9 y lo encontraba absurdo porque hay 6 combinaciones posibles o maneras distintas para obtener el número 9 y otras 6 para obtener el 10.
Combinaciones del 9 | Combinaciones del 10 |
1+2+6 1+3+5 1+4+4 2+2+5 2+3+4 3+3+3 | 1+3+6 1+4+5 2+2+6 2+3+5 2+4+4 3+3+4 |
Entonces si hay seis formas de obtener 9 y 6 de obtener 10 la probabilidad debería ser la misma, ¿no? Pues no ¿Por qué? pues porque tenemos que ver la probabilidad de que salga cada una de esas combinaciones.
Por ejemplo no es tan fácil que me salgan 3 treses, que daría nueve. Es mucho más sencillo que que me salga 1,3,6 que da diez por ejemplo, porque me puede salir 3,1,6 o 6,1,3. Hay 6 formas de que salga esa combinación:
(6,1,3), (6,3,1), (3,6,1), (3,1,6), (1,3,6), (1,6,3)
Así, hay 25 formas de que salga el 9 mientras que hay 27 de que salga el 10, tal como podemos ver en la tabla de abajo. Y eso es lo que Galileo explicó a su amigo Cosme II.
Combinaciones del 9 | Combinaciones del 10 |
1+2+6 (6 formas) 1+3+5 (6 formas) 1+4+4 (3 formas) 2+2+5 (3 formas) 2+3+4 (6 formas) 3+3+3 (1 forma) | 1+3+6 (6 formas) 1+4+5 (6 formas) 2+2+6 (3 formas) 2+3+5 (6 formas) 2+4+4 (3 formas) 3+3+4 (3 formas) |
Y hasta aquí nuestro artículo sobre Galileo y una pequeña explicación de probabilidad, que no sabemos si será cierta esta anécdota sobre Galileo y el duque, pero sí que os podemos asegurar que si tiramos 3 dados de 6 caras y no están trucados, lo más probable que nos salga un 10. Y esto es lo bueno de las matemáticas, que explican la realidad.
Ya sabéis… Y SIN EMBARGO SE MUEVE
Saludos desde el infinito!!!!!!
Referencias
- GALILEO Y EL DUQUE DE LA TOSCANA – VicMat
- https://es.wikipedia.org/wiki/Galileo_Galilei
- https://psicologiaymente.com/biografias/galileo-galilei
- https://www.biografiasyvidas.com/monografia/galileo/
- https://elobrero.es/cultura/47190-cosimo-ii-un-amigo-y-protector-de-galileo-que-buscaba-equilibrios-en-tiempos-convulsos.html